Admiración de Alba Chávez de Alvarado

Alba Chavez de Alvarado
 

La profesora y doctora Alba Chávez fue directora del instituto doctoral de la Facultad de Comunicación Social de la Universidad de Guayaquil de Ecuador.

 

Numerosas personalidades progresistas de distintas latitudes del mundo le
tributan un gran respeto al Presidente Kim Il Sung (1912-1994), fundador de la
Corea socialista. Figura entre ellas la ecuatoriana Alba Chávez, ex presidenta
del Instituto Latinoamericano de la Idea Juche.
En sus memorias «Presidente Kim Il Sung y el socialismo de Corea» publicada
en enero de 1991, Alba Chávez escribió: «Quisiera decir a los especialistas de
ciencias sociales del mundo que el único camino a seguir por el mundo de 5.400 millones de habitantes de hoy, 8.500 millones en 2025, 10.000 millones en
2050, es el socialismo de Corea guiada por el gran Líder Kim Il Sung».
Es la exposición de su confianza de que la humanidad debe marchar por el
camino del socialismo al estilo coreano centrado en el hombre que encarna la
idea Juche y actualiza la aspiración e ideal de las masas populares.
Entonces, ¿de dónde viene ese criterio?
En mayo de 1990 ella, en compañía de su esposo e hijos, visitó por cuarta
vez a la RPD de Corea.
Recorriendo varios lugares llegó a convencerse de que el socialismo de Corea
donde el pueblo trabajador, otrora reprimido y humillado por largo tiempo, se
aprecia como un ente más valioso siendo dueño de la sociedad con todo a su
servicio es un faro de esperanza de la humanidad.
Durante su estancia en Pyongyang, tuvo la fortuna de ser invitada a la
Primera Sesión de la IX Legislatura de la Asamblea Popular Suprema de la
República Popular Democrática de Corea.
En la sesión el Presidente Kim Il Sung pronunció el histórico discurso de
orientación política: «Manifestemos en alto grado la superioridad del socialismo
en nuestro país», cuyas frases se grabaron letra por letra en la mente de Alba
Chávez.
El Presidente aclaró que el socialismo coreano es un socialismo centrado en
el hombre e impregnado de la idea Juche y su característica principal la
constituye su autenticidad popular, dado que las masas populares son sus
genuinas dueñas y todo se pone a su servicio, y esclareció las vías para verificar
la causa socialista.
Alba Chávez se quedó muy conmovida.
Por aquel tiempo, resurgía el capitalismo en los países socialistas de Europa Oriental, los imperialistas vociferaban ruidosamente sobre el “fin” del socialismo
en el planeta y se escuchaban voces de preocupación por la existencia y el avance
del socialismo.
Fue precisamente cuando el Presidente Kim Il Sung comprobó la
superioridad del socialismo, la inevitabilidad de su victoria y la derrota del
imperialismo, y aclaró la necesidad de mantener invariable la bandera socialista.
El abuelo de Alba Chávez, adepto del ideal socialista, fundó el Partido
Socialista del Ecuador y libró enérgicas actividades por materializar ese ideal, y
su padre, líder del movimiento obrero, hizo todos los esfuerzos para realizar el
socialismo en su país. Influenciada por sus antecedentes, ella emprendió el
mismo camino. En esos días tuvo que sufrir la vida carcelaria y en el exilio. Se
esforzó tanto en busca del camino a seguir para realizar el ideal socialista al que
anhelaba tanto su familia, generación tras generación y por fin, llegó a conocer
la idea Juche creada por el Presidente Kim Il Sung.
Ella pensó que solo el Presidente, personificación del gran amor al hombre y
el pueblo, pudo presentar la original teoría socialista y establecer la sociedad
socialista en Corea.
Posteriormente ella escribió: «El Presidente Kim Il Sung, diciendo que él ha
venido haciendo la revolución y su construcción con el amor al pueblo y siendo
objeto del amor de este, manifestó que, como escribió en sus memorias, el
pueblo era maestro y doctor y en el pueblo estaban la filosofía y la economía
política y que, si le hubiera siquiera un momento para desatender la
vinculación con el pueblo y olvidar la existencia del este, no habría guardado
hasta la fecha el genuino e inmaculado amor al pueblo. Y sonriendo, expresó
con profunda significación que él trabajaría siempre con el billete para el viaje
hacia el pueblo».
Es de todo corazón el respeto y veneración de Alba Chávez hacia el
Presidente Kim Il Sung, poseedor de gran confianza y amor al pueblo.

Fuente: Embajada de la República Popular Democrática de Corea en la República Federativa del Brasil.

Kim Il-Sung junto al pueblo coreano